El elixir de la vida.Proyecto lector---------------

Hace mucho tiempo, en una isla del Pacífico,vivía un pirata que guardaba el elixir de la vida.
Al otro lado del Atlántico habia un niño llamado José.
Un día,José se levantó y se encaminó al puerto para dar una vuelta.Al llegar,se asombró al encontarse una taberna,llena de piratas malvados.Su amigo Luís le había dicho que tenían un elixir, codiciado por todos, se decía que provocaba tempestades de olas gigantes que arrasaban los barcos.
José pensó que si el eliuxir tendría ese poder.también podía curar a su madre enferma,que padecía una enfermedad incurable.
Una mañana ,acompañado de su amigo Luís,decidieron fabricar una barca de madera y adentarse en las profundidades del océano.Navegaron muchos días.Al noveno día.se encontraron las sirenas que emitían dulces cantos y guardaban la isla donde estaba el elixir mágico.Le preguntaron por él y las sirenas le respondieron que todos los que habían llegado para llevárselo.habían muerto por olas gigantes.
José y Luís se armaron de valor y retaron a las tempestades y a las olas gigantes.La barca sacudida por el tempopral finalmente encayó en la playa.
Exploraron el terreno y se dirigieron a una cueeva,donde decían que un pirata con cara de pulpo malhumorado,guardaba el elixir mágico.
El pirata al verlos entrar, les felicitó por haber conseguiodo llegar a la isla que otros muchos no habán podido hacerlo.
José le contó al pirata,que su madre estaba muy enferma y que no tenía solución, por eso había recorrido los mares en busca el elixir que pudiera curarla.
Al escuchar la historia,el pirata se conmovió y empezó a llorar y le dijó entre lágrimas que habían sido muy valientes.Entonces ocurrió que sus abundantes lágrimas subieron al cielo,convirtiéndose en estrellas que bajaron por la noche y curaron a la madre de José.
Desde ese día el pirata aprendió a ayudar a todos los que lo necesitaban y José y Luís a creer que hay que luchar por lo que uno piensa y en saber que la esperanza es lo último que se pierde.

Jose María Montiel Sánchez